Inspectoría

 

 

INSPECTORÍA GENERAL

Francisco Ramírez Ramírez

                  Inspector General                       

El buen clima de convivencia escolar es un elemento inseparable de la calidad de la educación, de aprender a convivir con el otro. Se trata de una dimensión fundamental de la experiencia educativa, que compete a todos los actores de la comunidad, considera distintos aspectos y demanda importantes desafíos.

Por este motivo nuestro colegio tiene las características de ser inclusivo, bien tratante, colaborativo entre los distintos actores, favoreciendo los espacios de conversación y de participación al interior de la comunidad escolar. .

En nuestro establecimiento el equipo directivo tiene un norte, una ruta de navegación que se concreta en un Proyecto Educativo conocido y socializado entre los profesores, los apoderados y los alumnos y cuando los estudiantes describen estos climas apuntan a un lugar en que circulan emociones positivas, en que se sienten respetados y seguros, en que se favorece la creatividad, el desarrollo de talentos especiales, además de la sensación de confianza en sí mismos y en los otros.

Los docentes  se desenvuelven en espacios con un clima que es nutritivo, y a su vez, se sienten validados, competentes, respetados,  y reconocidos, a la vez  con espacios de crecimiento y desarrollo personal y profesional. El buen clima de convivencia hace que las familias se sienten acogidas y en alianza con el colegio apoyar en la educación de sus hijos, perciben a nuestro establecimiento como un lugar en que sus hijos son aceptados, queridos y encuentran oportunidades para crecer tanto en lo académico como en lo personal.

La resolución pacífica de los conflictos que pueden surgir en el contexto escolar, se asocia, en particular, a la cultura del diálogo que promueve una cultura del intercambio de ideas y opiniones de sensibilidades y posiciones, así, los estudiantes son más capaces de procesar sus emociones y necesidades.